Sociedad
Más de 500 parejas swingers arribaron a Buenos Aires en un crucero
Pasajeros mexicanos, estadounidenses y alemanes reservaron un exclusivo crucero para compartir su estilo de vida.
Se trata de los pasajeros del Azamara Pursuit, un barco que comenzó su recorrido nueve días atrás en las costas de Río de Janeiro, siguió navegando hacia Uruguay y culminó su travesía en aguas argentinas. El crucero arribó alrededor de las 7 de la mañana en la Dársena A y partirá mañana, vacío, nuevamente hacia Brasil.
Este tipo de viaje es únicamente apto para mayores de 21 años y fue contratado por la empresa SDC (Seek, Discover y Connect), encargada de toda la organización. “Nadie sabía que era un barco de swingers. En su mayoría son mexicanos y estadounidenses, pero también hay alemanes y hasta argentinos, aunque son pocos”, explicaron fuentes de la Administración General de Puertos (AGP)
A bordo, los 1.128 pasajeros pudieron gozar de fiestas eróticas, pool parties y talleres a cargo de expertos del sector.
Luego de pasar por migraciones y culminar con los trámites de ingreso al país, los pasajeros del exclusivo crucero swinger comenzaron a salir de la terminal en tandas, entre las 9 y las 10 horas. Algunos decidieron volver a descansar al barco, mientras que otros optaron por recorrer la ciudad.
Con un estilo tradicional y sin salirse de la norma, el city tour de las parejas swingers estuvo a cargo de la compañía Furlong Incoming y comprendió a los barrios porteños de Recoleta, San Telmo y Puerto Madero. Además, el itinerario incluyó visitar la emblemática Plaza de Mayo, tomar clases de tango en La Ventana y pasear por el infaltable Caminito, en La Boca. Lo usual.
Un joven chocó en la mañana de Navidad contra dos palmeras ubicadas en el cantero central de la Avenida Varela.
El conductor perdió el control de su camioneta Toyota y terminó volteando ambos árboles, ubicados en el cantero de la avenida.
Personal de la Dirección de Tránsito le realizó un control de alcoholemia dando 1.50 grs.
El vehículo fue secuestrado.
Abella fue especialmente invitado al evento que reunió a empleados y dueños del comercio familiar que este año cumplió 100 años de vida.
El intendente Sebastián Abella acompañó la despedida de año del comercio SanFer, que este año cumplió 100 años de vida en la ciudad.
El jefe comunal fue invitado especialmente a la celebración de la que participaron los dueños y empleados que forman parte de esta gran familia comercial.
Durante la celebración, Abella compartió un cálido momento con los hermanos Fernández y, juntos, recordaron anécdotas y recuerdos de los años transitados en la ciudad.
Además, aprovecharon la ocasión para conocer en detalle y probar los vehículos de colección que forman parte de la familia y conservan en el taller.
El evento de cierre de año también contó con la presencia de la secretaria de Inclusión, Educación y Cultura, Elisa Abella, y el presidente de la Cámara Unión del Comercio e Industria de Campana (CUCEI), Octavio Lagar.
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