Empujado por la suba en alimentos, el indicador oficial que mide el costo de vida fue uno de los más altos del año; desde enero acumula una suba del 22,3% y la meta oficial es del 32% para 2020
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó hoy que la inflación llegó al 2,8% por ciento en septiembre y al 36,6% en el último año.
Empujado por la suba en alimentos, entre otros factores, el indicador que mide el costo de vida fue uno de los más altos del año, aunque por debajo de marzo cuando la inflación fue de 3,3 por ciento.
Con este incremento del mes pasado, el informe que mide el costo de vida acumula un 22,3% desde enero de este año.
En particular, las prendas de vestir subieron el 5,8%, bebidas alcohólicas 4,3%, transporte 3,6%, salud 3,5%, alimentos y bebidas no alcohólicas el 3% y, del otro lado, la educación el 0,3% y las comunicaciones el 0,1 por ciento, según el informe del instituto que lidera Marco Lavagna.
La inflación persiste pese a los férreos controles de precios medidos por el Indec, al congelamiento de tarifas y al ritmo suave de devaluación que desarrolló hasta ahora el Banco Central en el mercado oficial.
De mantenerse en estos niveles, alrededor del 3% pero sin superar ese número, se podría cumplir con la meta que plantean el Presupuesto 2021 y el ministro Martín Guzmán respecto de que el costo de vida de este año sería del 32 por ciento. Los analistas privados estimaron que la inflación para diciembre alcanzará el 36,9%, según el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) que realizó el Banco Central.https://e.infogram.com/8f58eb68-e105-413c-a5a7-5c4e34ef7cf5?src=embed
“Los datos de inflación están en línea con lo esperado (habíamos estimado 2.7% a comienzos de mes) y nos parecen relativamente altos. El dato oficial (2.8%) se dio aún a pesar de precios regulados congelados y con muchos sectores todavía afectados por la cuarentena/pandemia. Si miramos el desagregado por rubro, los precios que aumentaron menos que 2.8% mensual corresponden todos a sectores que aún no están trabajando de forma normal”, explicó Matías Carugati, director ejecutivo de la consultora Seido
“La foto, entonces, muestra una inflación a la que le cuesta bajar a pesar del contexto y los esfuerzos del gobierno. Lo importante es cómo sigue esta película. Creemos que en octubre la inflación se va a mantener en un nivel similar o hasta podría acelerarse. Por un lado, nuestras mediciones reflejan un arrastre estadístico bajo entre septiembre y octubre. Además, los precios regulados por el gobierno van a seguir “pisados”. En este sentido, los registros de inflación que medimos hasta ahora son relativamente bajos (inflación semanal de 0.4%, mensual promedio de 2.6%)”, agregó.
Por otro lado, para el economista hay dos factores que podrían complicar la dinámica de muy corto plazo. “Primero, el ajuste de precios de los bienes incluidos dentro de Precios Cuidados y Precios Máximos (algo que se vio que tuvo impacto en julio). Segundo, el cambio de estrategia cambiaria (abandono del crawling peg) del BCRA y las tensiones (crecientes) en el mercado. Este combo puede llevar a una depreciación más rápida del tipo de cambio oficial y mayor incertidumbre en general (porque los precios pierden el “ancla” de referencia), lo cual puede derivar en una aceleración de la inflación. Veremos si los datos de inflación de las próximas semanas sostienen lo observado hasta ahora (relativa estabilidad) o si hay un cambio de tendencia (aceleración)”, concluyó.
La cifra está en línea con las proyecciones privadas en donde se planteaba que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de septiembre habría llegado al 3%. El promedio de los 10 principales analistas del mercado estimó una variación de la inflación de 2,9% mensual, por encima del 2,7% que el Indec registró en agosto.
El Gobierno estimó que en diciembre de 2021 la suba del IPC llegará al 29%, frente al 32% proyectado para este año. En cambio, las consultoras que forman parte del relevamiento de Forecast Economics estimaron que alcanzará al 45,9%, frente al 38,7% previsto para fines de 2020.
En particular, para este año Euromonitor espera una suba de precios del 48% y UBS del 46,6%. Para el próximo, Empiria calculó un 57,9% y Econométrica el 56,7 por ciento.
En cuanto a la inflación del resto del mandato de Alberto Fernández, el presupuesto incluyó un 24% para 2022 y 20% para 2023, mientras que las consultoras y bancos calcularon 37,2% y 29,8%, respectivamente.
El mes pasado, la inflación en la Argentina volvió a ser la segunda más alta de la región, solo fue superada por el dato de Venezuela, cuyo Banco Central informó una inflación del 27,9% y del 844% en el último año, aunque las mediciones privadas superan largamente las cuestionadas cifras oficiales.
En cuanto al resto de los países de la región, Brasil registró una inflación del 0,64% el mes pasado y del 3,14% en el último año, según su instituto de estadísticas. Para todo el año, el banco Itaú proyectó un incremento del 3 por ciento.
En Perú, la inflación fue del 0,14% y del 1,82% en el último año. Para todo el año, se prevé una suba de los precios del 0,9%; en el caso de Colombia, el resultado del mes pasado fue del 0,32% y del 1,97% en los últimos 12 meses, mientras que se prevé que termine en el 2% en 2020.
En el caso de Paraguay, llegó al 1,6% el mes pasado y en 2020 subiría el 1,9%, mientras que en Ecuador hubo deflación del -0,16% en septiembre y del -0,9% en los últimos 12 meses. En Uruguay, el dato fue del 0,64% el mes pasado y del 9,92% en los últimos 12 meses; se estima que llegará al 9,5% a fin de año.
A su vez, el índice de inflación también se ubica entre los más altos del mundo. Según las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), este año, con un 39,5%, la Argentina ocupará el octavo lugar en el ranking de inflación mundial, detrás del 15.000% de Venezuela, Zimbabue, Sudán, Surinam, Yemen, Irán y Sudán del Sur.
Fuente: Infobae.com