El PCC, o Primeiro Comando da Capital, nacido en las cárceles de Brasil, es una de las organizaciones criminales más temibles en el Cono Sur, superada solo por la FARC en alcance y poder de fuego. Dedicada al sicariato y al negocio narco a gran escala, con un largo brazo en Paraguay, su sombra sobre la Argentina ha sido histórica.
Esta semana, la División Investigación Federal de Fugitivos y Extradiciones del departamento Interpol de la PFA detuvo en Buenos Aires a Elvis Riola de Andrade, uno de sus presuntos asesinos, buscado por un tribunal de Sao Paulo para que cumpla una condena por asesinar a un policía en mayo de 2009.
Según la investigación en su contra, Elvis intentó fugarse a África con su familia, con pasajes de Ethiopian Airlines. Sin embargo, terminó en Buenos Aires. Tras rastrearlo, la PFA lo arrestó en una casa en el country Cardales Village de Campana, según confirmaron fuentes del caso. El PCC, revelaron investigadores del caso, no es su única afiliación: la oficina de Interpol en Brasilia también lo vincula a una reconocida escola do samba y a la hinchada del club Corinthians.