Con un sentido homenaje y luego de diez años de servicio, Nerón, uno de los canes penitenciarios fue retirado de sus funciones operativas y de seguridad en una cárcel bonaerense de San Martín y fue adoptado por una familia que vive en Campana.
Nerón es un ovejero alemán pelo largo, macho, de diez años de edad, que llegó a la Unidad 47 del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) en 2018 gracias a una donación realizada por la Unidad 48 del mismo Complejo Penitenciario.
La familia que lo adoptó vive en el barrio Otamendi de Campana y a través del Guardia Nicolás Salemme accedieron al proceso de adopción que se llevó adelante en el marco de la resolución del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires denominada “Viejos camaradas” que autoriza a pasar a retiro a los canes que dejan de ser operativos.
El can se desempeñaba en actividades de seguridad, como en tareas de recuento de población y de custodia del perímetro de la cárcel, pero su tiempo de servicio activo terminó y fue pasado a retiro. La ceremonia se llevó a cabo en la plaza de armas del establecimiento carcelario y contó con la participación de autoridades y personal penitenciario y la nueva familia del can.