Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli, Luciano, Lucas y Ciro Pertossi. Los nombres pasarían desapercibidos si no fuera porque este grupo de rugbiers zarateños está acusado de haber cometido en enero de 2020, en Villa Gesell, uno de los crímenes más conmocionantes de los últimos años: el asesinato de Fernando Báez Sosa, por el que podrían ser condenados a perpetua en un juicio próximo a comenzar.
El juicio contra los ocho acusados comenzará el mes que viene en la ciudad de Dolores. El cronograma prevé una serie de audiencias que se desarrollarán entre el 2 y el 31 de enero de 2023 en el Tribunal en lo Criminal N°1, integrado por la jueza María Claudia Castro y los jueces Christian Rabaia y Emiliano Lázzari, quienes escucharán al menos 130 declaraciones testimoniales.
El listado de personas que pasarán por la sala de audiencias del Tribunal comienza con Silvino y Graciela, padre y madre de la víctima, que declararán ante el Tribunal en la primera jornada del juicio.
Como en todo proceso, los acusados deben estar presentes pero todavía no se sabe bajo qué modalidad. Es que la pandemia de coronavirus incorporó a ese tipo de procesos la posibilidad de asistir a través de la vía remota, con lo cual los siete rugbiers podrían conectarse desde el penal de Melchor Romero, en La Plata, para seguir las audiencias por Zoom.
Pero aunque su traslado a Dolores requiere de un operativo logístico de seguridad bastante complejo, hay posibilidades de que aparezcan en los Tribunales de Dolores al menos la primera jornada y la última, antes del veredicto que podría ser la cadena perpetua. Vale recordar que están acusados de homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas y por lesiones leves contra amigos de Báez Sosa que estaban la noche del crimen en el boliche Le Brique de Villa Gesell.
La investigación del crimen de Fernando Báez Sosa
La instrucción de la causa comenzó en Dolores, ya que es la jurisdicción que le corresponde a Villa Gesell, la localidad donde ocurrió el hecho.
Fueron el juez de Garantías David Mancinelli y la fiscala Verónica Zamboni quienes estuvieron a cargo del impulso de la investigación en la que reunieron una importante cantidad de pruebas, entre ellas las cámaras de seguridad que filmaron la golpiza que terminó con Báez Sosa muerto y el traslado posterior de los acusados a un local de comidas rápidas en el que comieron hamburguesas, como muestra el siguiente video.
Uno de los puntos centrales de la investigación giró en torno a la responsabilidad de dos integrantes del grupo de rugbiers que generó la pelea que terminó en tragedia. Se trata de Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, quienes no formarán parte del juicio que comenzará a desarrollarse en un mes en la localidad de Dolores.
Vale recordar que en febrero de 2020, al poco tiempo del hecho, Milanesi había quedado en libertad junto a Guarino por decisión de la Fiscalía.
Después, el juez Mancinelli confirmó el sobreseimiento del segundo y determinó que la situación procesal de Milanesi debía definirse en un juicio. Ante eso, el abogado defensor Hugo Tomei presentó un recurso de apelación que puso a la Cámara Penal en el centro de la escena: debían decidir si hacían lugar o no al pedido.
Finalmente los camaristas Luis Defelitto, Fernando Sotelo y Mirian Darling Yaltone, por dos votos a uno, hicieron lugar y dictaron el sobreseimiento definitivo de Milanesi. Para hacerlo citaron los mismos argumentos de la Fiscalía, que había considerado que no había pruebas de su participación en la cadena de hechos que terminó en asesinato.
Así las cosas, sólo serán juzgados Thomsen (21), Ciro (21), Luciano (19) y Lucas Pertossi (22), Comelli (21), Benicelli (21), Cinalli (19) y Viollaz (21). De todos modos, la querella de la familia de Báez Sosa, representada por los abogados Fernando Burlando y Fabián Améndola, creen que el juicio puede ser la puerta a la incorporación de nuevos hechos que deriven en nuevas causas judiciales.