Así lo aseguró la actual concejal de Juntos, Elisa Abella, al hacer un balance de año de todos los objetivos cumplidos en estos últimos dos años en los que estuvo a cargo de la Secretaría de Desarrollo Social, Educación y Cultura del Municipio.
Al cumplir 2 años a cargo de la Secretaría de Desarrollo Social, Educación y Cultura del Municipio, Elisa Abella, comenzará a ocupar una banca en el Concejo Deliberante, gracias al voto de los vecinos en las últimas elecciones.
Llegó al Departamento Ejecutivo en el 2019 gracias a la confianza que el intendente Sebastián Abella puso en ella, algo que le representó un gran orgullo, pero también una enorme responsabilidad.
Le tocó atravesar un contexto tan difícil como inesperado generado por la pandemia por el Covid-19 y la cuarentena más larga del mundo que trajo aparejado una gran debacle en materia educativa y económica, pero nunca bajó los brazos.
Esto hizo que, a los tres meses de asumir, tengan que barajar las cartas y dar de nuevo, para ponerse a la altura de las circunstancias, logrando con un gran trabajo en equipo a partir de cada escucha de las necesidades y preocupaciones de los vecinos y vecinas.
Durante la pandemia, Elisa Abella se puso al frente de la situación y se concentró en acompañar a cada campanense, articulando con la Secretaría de Salud. Para ello, se armó un call center para llamar a cada uno que haya sido asistido en nuestro Hospital Municipal San José, con la finalidad de contenerlos, acercarles medicación, artículos de limpieza y comida.
También se colaboró en todos los operativos sanitarios Detectar, previniendo y difundiendo las medidas de cuidado en los distintos barrios de la ciudad, como así aislando de forma rápida a aquellas personas con síntomas vinculados al Covid-19.
Durante este período, no sólo la salud estaba en juego. Las malas decisiones nacionales pusieron en jaque a la educación, lo que motorizó a la Secretaría de Desarrollo Social, Educación y Cultura a generar acciones y políticas públicas en pos de defender la presencialidad, a través de reuniones con directores de escuelas públicas y privadas, y fundamentalmente con los padres.
Siguiendo con su premisa de sobre la educación que “es una de las grandes llaves para superar las crisis y crecer”, se pusieron en marcha distintos programas educativos, tales como el Detectar Educación, que llegó a alrededor de 7.000 casas ofreciendo el programa virtual “Terminá la Secundaria”, alcanzando así más de 800 inscriptos.
Asimismo, se creó el Primer Centro Educativo Digital, para poner al servicio jóvenes y adultos la educación del futuro incluyendo cursos de programación, robótica, videojuegos, entre otros. Se ayudó a las escuelas con la recuperación de aprendizajes, se formó la Red de Apoyo Escolar absolutamente gratuita, tanto para primaria como secundaria.
Con el panorama económico, era imposible dejar de tener en cuenta la formación en oficios para abrir caminos a distintos trabajos y emprendimientos de nuestros vecinos. Por tal motivo, se ofrecieron cursos virtuales de oficios y, cuando la pandemia lo permitió, se abrió el Primer Programa Municipal de Oficios presencial en dos centros, con la oferta de 8 cursos introductorios de gastronomía, diseño de indumentaria, telar, electricidad, plomería, construcción en seco, mecánica de motos y programador web, egresando más de 600 estudiantes.
Incluso para darle más herramientas a todos los campanenses que decidieron emprender, se creó la Academia de Emprendedores de Campana, con interesantes módulos tales como, marketing digital, ideación del negocio y presupuesto.
La pandemia hizo estragos principalmente en dos franjas etarias: los niños y los adultos mayores. Por ello, se impulsó el Programa de Fortalecimiento Familiar, las Juegotecas educativas y Volver al ruedo para los más grandes, con quienes se pensó en una ciudad amigable que les ofrezca un mejor vivir.
Tampoco hay que olvidar a los jóvenes, que quedaron en el medio. Para ellos se destinó el programa “Soy joven, soy protagonista” en el que todos aportaron su aire fresco, visión e ideas para seguir construyendo una ciudad más inclusiva para todos.
La recreación, el deporte y la cultura fueron otras de las necesidades que provocó la pandemia, lo que llevó a Elisa Abella y su equipo a generar distintos programas como “Disfrutando Costanera”, la “Peatonal del Arte”, las muestras de artistas plásticos, la Primer Feria de Libro, las colonias de vacaciones y una gran oferta de talleres culturales y escuelas deportivas.
En materia de género, se creó la Dirección de Derechos Humanos, Género y Diversidad, potenciando las redes de cuidado y contención con la línea 0800- Derechos y el desarrollo y autonomía económica para las mujeres.
Otra de las claves de su gestión en la secretaría, fue trabajar codo a codo con todas las entidades y organizaciones de la sociedad civil para dar respuesta y mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos.
“Fueron dos años muy intensos llenos de proyectos y desafíos. Termino mi gestión feliz por lo logrado, agradecida con toda la gente que trabajó conmigo y enriquecida de todos los aportes que me hicieron mis vecinos campanenses”, enfatizó Elisa Abella tras hacer un balance de todo lo realizado en los últimos años.