Según Vatican News, el portal de información de la Santa Se, la Natividad de la Virgen es una de las fiestas marianas más antiguas y se cree que su origen está ligado a la fiesta de la dedicación, en el siglo IV, en una antigua basílica mariana de Jerusalén, sobre cuyas ruinas fue construida en el s. XII la donde hoy está la actual iglesia de Santa Ana.
El 8 de septiembre es la tercera fiesta de la “natividad” en el calendario romano, que conmemora la Natividad de Jesús, el Hijo de Dios (25 de diciembre, Navidad); la de San Juan Bautista (24 de junio) y en este caso la de la Santísima Virgen María.
En Milán, esta fiesta se remonta al siglo X, a la catedral, dedicada a “María naciente”, que fue consagrada en 1572 por San Carlos Borromeo. Y siempre en Milán, en la calle Santa Sofía, se encuentra el santuario donde se conserva una imagen de María recién nacida, custodiada por las Hermanas de la Caridad de las Santas Bartolomea y Vicenta.